La resistencia a los antimicrobianos se da cuando microbios como bacterias y hongos desarrollan la capacidad de neutralizar los medicamentos elaborados para eliminarlos, de acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Consecuentemente, los microbios no se eliminan y continúan su multiplicación.
Según la definición de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la inocuidad de los alimentos es una disciplina, proceso o acción de carácter científico que ayuda a prevenir que los alimentos contengan sustancias que puedan perjudicar la salud de las personas.
Ante esto, es importante que en toda la cadena de producción y preparación de alimentos se empleen buenas prácticas de salubridad y se sigan las normas estipuladas por las autoridades pertinentes, acciones en las que destaca Grupo Kosmos.
Los microorganismos resistentes a los antimicrobianos pueden llegar a los alimentos de varias maneras y afectar su inocuidad:
- Al momento de sacrificar y procesar a los animales para producir alimentos, las bacterias pueden contaminar la carne y sus derivados a través de equipos, herramientas o recipientes de procesamiento y almacenamiento contaminados.
- Los microorganismos resistentes contenidos en el excremento de animales pueden pasar al entorno que los rodea.
- Las frutas y verduras pueden contaminarse a través del contacto con tierra, agua o fertilizantes contaminados por heces fecales de animales.